Toponimia de origen germánico en la Baja Ribagorza occidental
Contenido principal del artículo
Resumen
Estudio de la presencia germánica en la zona de la Baja Ribagorza occidental a través de la toponimia, la cual puede dividirse en dos grupos: uno es el que se ha fosilizado a partir de apelativos germánicos que a veces perviven como apelativos románicos (Galda, Guardia y Villagarda, Marros, Lesna, Comabarón); el otro es el que parte de antropónimos germánicos que correspondieron a personas de ese origen afincadas en territorio ribagorzano (Salamero, Fabardo, Grustán, Mas de Balón, Comagroz, Sorina, Portaspana, Palanombayo, Puchalin, Barranco, Argüén, Pueyo de Marguillén, Manialta, Manifranco, Planiral, Grabán, Ubiergo). Hay que tener en cuenta que existen dos etapas cronológicas para la introducción de esos germanismos: una es la época visigótica (476-711), que facilitó la entrada de las palabras godas,y otra la época carolingia (desde principios del siglo IX, en que la Ribagorza pasa a depender de los condes de Tolosa), que dió lugar a la introducción de palabras de origen franco.